A lo largo de estos meses he aprendido infinidad de técnicas y he admirado innumerables trabajos fotográficos de todo tipo, cada día que paso practicando siento que la fotografía se va convirtiendo en una de las actividades que más satisfacciones han traído a mi vida personal.
Cada una de las fotografías que comparto en internet, es una rebanada de mi vida, que he logrado conservar para la posteridad, al observar esas imágenes puedo evocar el momento con suficiente claridad. Cada fotografía cuenta una historia…
Papel de internet
Internet es parte de nuestras vidas y con la ayuda de Facebook, estamos en contacto con todos nuestros amigos y nuestra familia, podemos compartir con ellos lo que pensamos, pero sobre todo compartimos fotografías…según Facebook a diario se suben a esta red social más de 250 millones de fotografías.
Es tan fácil que cualquiera puede hacerlo, sin embargo al ver las fotografías en algún álbum que ha compartido algún contacto, no puedo dejar de fijarme que rara vez siguen algún guion, la mayoría de las veces son imágenes que podrían estar en cualquier orden y no habría diferencia, sin embargo lo que ocurrio en la vida real, si tiene un orden, y si siguió una secuencia mientras fuimos testigos presenciales.
Testigo presencial
Cada uno de nosotros en nuestra aspiración de ser fotógrafos asume el rol casual de ser testigo presencial de lo que ocurre en esa línea de tiempo, a veces esa línea de vida es la nuestra, pero en muchas otras ocasiones, se trata de las líneas de tiempo y vida de otras personas, que ahí se han reunido.
Tan solo con revisar nuestro archivo de imágenes, identificando aquellas fotografías que atrapan nuestra atención, es posible volver a vivir esos momentos que se han quedado suspendidos en el tiempo por medio de una fotografía.
La fotografía nos da la única e increíble posibilidad de vivir momentos únicos y tener la posibilidad de atraparlos para conservarlos, atesorarlos y compartirlos.
Con la revolución digital que ha ocurrido en el campo de la fotografía, esta posibilidad se ha multiplicado, una imagen puede ser copiada y compartida las veces que sea necesario, ya no se trata de una sola imagen impresa en papel, se trata de una imagen digital, que puede existir en casi cualquier medio actual.
Nuestra posibilidad de compartir ese momento es increíble…
Documentar nuestra vida.
A todos los que descubrimos la fotografía como un medio de expresión y la adoptamos como una actividad que ocupa un espacio en nuestras vidas, sabemos que llega un momento en el cual no nos basta con captar lo hermoso de esta vida, queremos más.
Cada imagen que creamos de nuestra vida, con familiares y amigos, es un documento sumamente valioso, sin darnos cuenta estamos documentando nuestra vida en común, momentos que algún día serán recordados y compartidos con personas que tal vez ni si quiera han nacido el día de hoy.
Casi siempre este tipo de imágenes las conservamos celosamente en nuestro ámbito familiar, no se comparten en internet con todo el mundo, si las colocamos en internet, ha de ser en un ambiente que nos ofrezca la seguridad de controlar quien puede verlas.
El valor documental de estas imágenes es único, cuando las creamos no estamos consientes de lo que valdrán en términos de remembranza, el valor sentimental que se acumula con cada imagen familiar es algo que difícilmente podríamos valuar.
Una historia…una sola imagen.
A pesar que podemos usar el modo de disparo continuo, para obtener muchas imágenes a la mayor velocidad posible, a pesar que podríamos lograr una sola imagen valiosa, el riesgo de no obtener ninguna es muy elevado si no estamos consientes y tenemos en control de lo que estamos haciendo.
Para lograr una sola imagen que logre contar una gran historia, se requiere técnica, conocimientos de composición, el mayor control posible sobre nuestro equipo fotográfico y sobre todo lograr estar listo en el momento oportuno, justo en el momento en que sucede ante nuestros ojos.
Si están leyendo estas líneas y están pensando que es pura palabrería, es simplemente porque aun no han llegado a ese punto que comentaba al principio, en el cual han empezado a entender la importancia de la historia de tras de cada imagen.
Importancia de la historia en cada imagen.
Imaginen que fueron contratados para fotografiar un gran evento para una revista o un periódico, la meta consiste en obtener una sola imagen que pueda contar la historia acontecida, a tal grado que esa única fotografía pueda ser usada como portada de la revista o como imagen principal de la sección correspondiente en el periódico.
Imagínense que ninguna de las fotografías que han captado pueda ser considerada lo suficientemente buena para ocupar ese lugar privilegiado…
En cada ocasión que tengan la oportunidad de fotografiar algo o a alguien deben sentir esa responsabilidad que les exige lograr su mejor toma, esa fotografía debe ser la mejor fotografía, la que logre captar la esencia del momento, la que puedan colocar en la portada de su álbum.
Cuando comprendemos la importancia que tiene la historia que cuenta una imagen, es justo cuando los disparos aleatorios a lo que sea, con la esperanza de lograr algo digno, dejan de ser la meta de cada día.
Proyecto 366-365.
Este año me he propuesto cumplir un reto que les propuse en el artículo denominado: 365 fotografías , solo que en este año se denomino Proyecto 366, por ser año bisiesto.
Este proyecto ha sido una responsabilidad, como si tuviera un compromiso de trabajo para entregar algo en una fecha determinada…ha resultado diferente a como me lo planteaba, porque no puedo dejar pasar un día sin que haga una fotografía para poder cumplir con la meta.
Lo más importante de este proyecto es que a raíz de este compromiso conmigo mismo me he mantenido al pendiente de usar mi cámara todos los días…antes pasaban días y no recordaba usarla, ahora la llevo conmigo a todos lados, cada vez que salgo, incluso a la oficina.
Comentario final
Hoy solo tengo como meta despertar en todos los lectores, el deseo de contar historias con las fotografías, las imágenes que pueden contar la historia que vivimos, son como una película que podemos ver a nuestro ritmo, podemos disfrutar de la historia detrás de ellas, pero podemos detenernos en cada una para sentirnos parte de ese momento.
No basta con captar rebanadas del tiempo aisladas, si esta en nosotros hacer mas grande el relato, por que no hacerlo?
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