Como fotógrafos somos quisquillosos con ciertos detalles, tales como la nitidez, las zonas sobre expuestas, las sombras empastadas en negro y desde luego los colores. Todos estos detalles son evaluados minuciosamente a través de nuestro monitor.
Pero y si el monitor no está correctamente calibrado? Entonces podríamos estar viendo mal enfocada una imagen correcta o podríamos ver una gama de colores en él y al imprimirlas obtener otra. Si estas interesado en el tema, te invito a continuar leyendo…